Ilustración de una cama acogedora con un pez dormido, ideal para un ritual de buenas noches con cuentos infantiles.
Portada de un cuento infantil 'Buenas Noches', un ritual perfecto para la hora de dormir.
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"Buenas noches, Pez": Ritual nocturno para dulces sueños

Uno de los cuentos favoritos a la hora de dormir es “Buenas noches, Pez”. La poesía trata de un a un niño mientras se despide de los distintos objetos y seres a su alrededor antes de irse a la cama. Es un relato encantador y entretenido, además  crea un ambiente de calma y serenidad, perfecto para ayudar a los más pequeños a relajarse y prepararse para una noche de dulces sueños.

“Buenas noches, Pez” nos lleva de la mano a través de la rutina nocturna de un niño que se despide de todo lo que le es querido antes de dormir. El niño dice “buenas noches” a cada objeto y ser en su habitación. Este ritual se ha vuelto una tradición que los niños imitan, y les ayuda a calmarse y sentirse seguros antes de dormir.

El ritual de despedida ha sido una herramienta increíblemente útil. Mientras leemos esta poesía, los pequeños a medida que se va leyendo se despiden mentalmente de sus seres y objetos más queridos. Este acto de despedirse es calmante y les da una sensación de seguridad antes de dormir. Además, les enseña a valorar y apreciar lo que tienen.

Leer poesía y cuentos antes de dormir, como “Buenas noches, pez”, tiene muchos beneficios para el sueño de los niños. Ayuda a los mismos  a relajarse, reduce su ansiedad y hace que la transición a la hora de dormir sea mucho más fácil. El ritmo de la poesía y el acto de decir “buenas noches” crean un ambiente  tranquilo que es ideal para inducir el sueño.

Se han encontrado varias formas de incorporar la poesía en nuestra rutina nocturna:

1. Lectura diaria:

Leemos “Buenas noches,Pez” cada noche. Esta constancia ayuda a los niños a anticipar la hora de dormir y a sentirse más tranquilos y seguros.

2. Un ambiente tranquilo:

Hacemos que el entorno de lectura sea tranquilo y cómodo. Apagamos las luces brillantes y usamos una luz suave para crear el ambiente adecuado y favorable para este momento.

3. Participación activa:

incentivamos a los más pequeños a participar activamente. Dicen “buenas noches” junto con nosotros y señalan los objetos y seres en el cuento.

4. Extender el ritual:

Después de leer el cuento, continúan el ritual de despedida con sus propios objetos y seres en la habitación. Esto refuerza la rutina y crea un sentido de continuidad.

Bebé sonriente en la cama con un libro amarillo, disfrutando su ritual diario de lectura antes de dormir.

Este es mucho más que un simple cuento para dormir; es una herramienta fundamental para ayudar  a los niños a relajarse y prepararse para una noche de descanso reparador. A través de su dulce repetición y su enfoque en la despedida de objetos y seres queridos, este libro crea un ambiente de serenidad que facilita el sueño. Incorporar “Buenas noches, pez” en la rutina nocturna no solo ha hecho que la hora de dormir sea más tranquila, sino que también ha creado un espacio especial y agradable para compartir momentos únicos en familia.